Geometría Sagrada

Artículo #7.11
Fuga de energía sexual: desequilibrio en el tetraedro

Toroides Humanos y energía sexual

®Todos los derechos reservados. Autor del documento: Arturo Ponce de León para Psicogeometría México. Colaboración: Ninón Fregoso.Se autoriza la reproducción del material contenido en este sitio siempre y cuando se cite la fuente y se respete la integridad del texto.

Extracto del libro "El Poder de la Vida en la Geometría Sagrada y la Arquitetura Biológica de Arturo Ponce de León y Ninón Fregoso" Adquierelo aquí

Las enfermedades autogeneradas surgen mayoritariamente por un desequilibrio en el Toroide Mayor que repercute en el flujo de energía vital que ingresa al sistema. La energía sexual se manifiesta como expresión inmediata de la fractalidad de la capacitancia de carga. El Dr. Soto sostiene que el cuadro de predisposición sintomatológica por fuga de energía sexual en el ser humano ilustra lo que ocurre en este proceso. La enfermedad es multifactorial y no podemos caer en el simplismo de creer que es causada por un solo elemento, en ella encontramos factores sociales, psicológicos, energéticos, físicos, geométricos, etc. Sin embargo, en nuestra sociedad, donde las personas por lo general no tienen una adecuada información sobre cómo ordenar e irradiar su propia energía sexual, generan complicaciones en este nivel que repercuten en muchos otros. Los dogmas ciegos y las falsas creencias, además de propiciar la desinformación, han ayudado a fomentar este problema. La sexualidad es una relación extraordinaria y maravillosa entre la energía vital de las personas y el universo mismo. 

Cuando la energía vital, que proviene de la interacción entre la diferencia de potencial eléctrico y magnético entre los toroides 1 - 13 y la del Toroide Mayor, se ve interrumpida o desviada en el toroide vertical instintivo, surgen una serie de síntomas tales como el apetito crónico, la comida compulsiva, el sueño incesante, la anorexia o bulimia, el insomnio o los cambios bruscos de temperatura. Cuando la energía vital se escapa desequilibradamente por el toroide motriz surgen síntomas tales como el habla incesante sin contenido, los movimientos involuntarios, los tics nerviosos, la hiperactividad, el fervor innecesario, los ademanes bruscos, la precipitación y la incapacidad para relajar el cuerpo o sentir el propio latido cardíaco.

En el caso del toroide emocional, ocurren una serie de síntomas tales como la expresión de corajes y celos desmedidos, angustia, miedos a la altura y a arañas o bichos, fobias, irritabilidad y rencores repetitivos. Cuando la energía vital se escapa por el toroide intelectual, se producen los siguientes síntomas: tono inmoderado de la voz, terquedad, falta de desplazamiento de ideas, necedad, obcecación, fanatismo, dogmatismo, obsesiones, orden militar, inflexibilidad o limpieza obsesiva (mucho más allá de la higiene).